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miércoles, 2 de diciembre de 2009

El imponente coloso de Ramses II en Menfis


La ciudad de Menfis, fundada alrededor del año 3,100 a C, fue la legendaria ciudad de Menes: el primer faraón de Egipto aquel que unió el Alto y Bajo Egipto constituyéndolo en un único reino. La tradición cuenta que Menes levantó la ciudad creando diques para proteger la zona de las crecidas del Nilo. Más adelante esta urbe del Reino Antiguo se convirtió en el centro administrativo y religioso de Egipto, y en una de las ciudades más importantes del mundo antiguo. Se dice incluso que pudo ser la metrópoli más poblada  hasta el año 2250 a C.

Menfis debió de ser inmensa, si tomamos en cuente el tamaño de sus necrópolis que incluyen las zonas circundantes de Dahshur, Saqqara, Abusir, o Giza.

A día de hoy, poco queda de esta gran ciudad de la antiguedad, simplemente algunas ruinas de poca importancia en medio de campos de cultivo y los restos del templo de Ptah (dios principal de la ciudad), junto al que se encontró el imponente coloso de Ramses II que hoy puede verse en un pequeño museo construido alrededor de la estatua.



El coloso de Ramsés II es una majestuosa estatua tallada en piedra silícea  de 10,3 metros.  Originalmente la estatua medía 13 metros de largo pero desgraciadamente  ha llegado a nuestros días sin la parte inferior de las piernas. El nombre del faraón aparece una y otra vez en cartuchos en su hombro derecho, cinturón y pectoral.

Este coloso sin duda,  bien merece una parada en la visita a otras zonas arqueológicas de mayor importancia como Giza, Saqqara o Dahshur mundialmente conocidas por sus pirámides.

Fotografías Viajar con Estilo

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